Cuando leo cosas como ésta siempre recuerdo aquella vez que vi por televisión la jeta rubicunda de una foránea farfullando que una de las cosas que menos le gustaba de España era que
muchos hombres maltrataban a sus mujeres. Pues sí, es cierto, pero eso ocurre aquí y en la Conchinchina. Lo que sucede es que hasta hace unos años los casos de violencia de género, sexista, machista o como la quieran llamar estaban dentro de lo que estadísticamente podríamos considerar como normal. Pero a partir de la llegada de la marabunta extranjera, sin embargo, las cifras de palizas y asesinatos de mujeres se han multiplicado vertiginosamente, lo mismo que cualquier otro tipo de delito. ¡Qué tiempos aquellos en los que la mayoría de las noticias que aparecían en la sección de sucesos de los periódicos estaban relacionadas con accidentes o crímenes cometidos allende nuestras fronteras! Ahora es que la prensa no da abasto. Sigamos así, resignados o mirando hacia otra parte ante lo que se nos viene encima.
El 53,7% de las víctimas que el gobierno atendió en los primeros meses de 2006 en sus centros de acogida eran extranjeras. Un colectivo que representa (oficialmente) el 11% de la población en la región constituye la mitad de los afectados por el maltrato en la pareja.
n estudio realizado entre mujeres dominicanas y ecuatorianas financiado por el Ayuntamiento explica que las inmigrantes, especialmente latinoamericanas, son un grupo de riesgo porque "sufren relaciones de desigualdad en la pareja muy asentadas". El 50% de las dominicanas consultadas reconoce haber sufrido violencia psíquica (descalificación verbal, control económico y social, prohibición de ver a su familia o amigos). Un 61,3% de las mujeres de esta nacionalidad asegura haber estado a merced de la violencia física. Además, el 70% dice haber sido víctima de violencia sexual.
En el caso de las ecuatorianas, el 30% asegura encontrarse actualmente expuesta a situaciones objetivas de maltrato físico, y el 80% de maltrato psíquico.
Madridhabitable.org
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